En algún momento nos van a pedir una carta de recomendación, al menos una vez en la vida. Cuando eso ocurra, debemos estar preparados para pedírsela a la persona correcta.
No hay que restarle importancia a una carta de recomendación, hay empresas que dan mucho valor a este tipo de documentos. Además, recuerda que es un extra de tu presentación con alguien que quiere conocerte y saber más de ti.
Además de tu currículum, presentación personal y habilidades, tener buenas referencias -y que hablen bien de ti- es un recurso muy poderoso para conseguir ese empleo que estás buscando.
Entonces, ¿A quién le vas a pedir una carta de recomendación?
Primero que nada hay que saber quién solicita esa carta, en este caso nos vamos a enfocar en una carta para un empleo, pero también podría ser de estudios, como solicitar una beca o para cursos un diplomado.
En el ámbito laboral, lo más probable es que te pidan dos cartas de referencia o recomendación. Lo ideal es que una de ellas sea de un familiar o un amigo y la otra de un empleo anterior.
Páginas especializadas en Recursos Humanos como OCC, recomiendan que la persona que realice este documento sea un jefe directo de un empleo anterior. Para la segunda carta, puedes intentar con un familiar que tenga estas dos características: 1. Un buen empleo estable 2. Que haya trabajado durante varios años en ese lugar.
¿Qué pasa si no tengo experiencia laboral?
En el caso de los recién egresados, se recomienda que un profesor, o alguien con quien se hayan hecho prácticas profesionales, funja como referencia.
Si no se tiene experiencia laboral, es recomendable pedirla a una persona conocida, de nuevo, con buen historial laboral.
Recuerda que debe ser un documento formal y que debe llevar, al menos, la siguiente información:
- Fecha y dirección.
- Destinatario.
- Mensaje.
- Nombre, firma y puesto.
- Datos de la empresa.
Con información de Dinero en Imagen.