Eric Castellano Guy
Cotidianamente escuchamos sobre el Coaching ejecutivo, pero, exactamente qué es, cómo se hace? Se trata de una herramienta de desarrollo de Ejecutivos, Gerentes y Supervisores que se lleva a cabo mediante un sistema de asesoramiento personal y profesional para impactar positivamente en la organización. Cabe destacar que este sistema proporciona información, conocimientos, habilidades, referencias, colaboración y asesoramiento personalizado para que cada directivo desarrolle y consolide habilidades gerenciales clave, relacionadas con:
- Visión. Lograr que todos los empleados o colaboradores vean las cosas de la misma forma.
- Planeación y Eficiencia. Manejo del tiempo, establecimiento de objetivos y evaluación.
- Resultados y Efectividad. Capacidad de centrarse sobre lo importante y no sobre lo urgente.
- Delegación. Organizar eficazmente a los colaboradores, llegando al empowerment.
- Aprendizaje. Tanto los conocimientos (formación) como la mentalidad (desarrollo)
- Comunicación. Influenciar positivamente a los demás, y crear una visión común.
- Equipo. Potenciar el compromiso, integración y sinergia en el mundo actual.
- Integridad. Entender y promover el valor del trabajo y honradez, personal y profesional.
OBJETIVOS PRINCIPALES: Que el Directivo se logre desarrollar tanto profesional como personalmente para lograr un funcionamiento óptimo como líder o ejecutivo y que éste desarrollo personalizado tenga un impacto a todos los niveles en la empresa.
¿PARA QUIÉN VA DIRIGIDO? Está destinado principalmente a todas las personas con responsabilidad dentro de una empresa. Tanto los que ya tienen dicha responsabilidad, cuanto para aquellos de reciente promoción o contratación; así mismo, a todos los colaboradores considerados “clave”, no sólo desde el punto de vista objetivo, sino también desde el punto de vista subjetivo.
¿POR QUÉ EL COACHING ES NECESARIO Y BENEFICIOSO? Por la sensación de algunos ejecutivos de estar desbordados debido a los nuevos retos que han de asumir las empresas. Por el poco tiempo que los ejecutivos tienen para ellos mismos debido a la necesidad de la operativa continua teniendo que reducir costos, aumentar la productividad y mejorar el servicio al cliente. También debido a la presión con la cual tienen que vivir día a día que se retroalimenta a sí misma.
Otro factor es el aislamiento que experimentan al no compartir sus problemáticas con los colaboradores, primero, porque una de sus tareas principales es protegerles del miedo, transmitir seguridad y motivarles; y segundo, porque nos cuesta mucho reconocer que hay cosas que nos sobrepasan, como determinados retos y responsabilidades.
No menos importante es porque en las habilidades “blandas” y sociales muchas veces no suelen ser tan competentes como en las “duras”, aunque a menudo éstas también tienen que “sufrir” un repaso y, también por la necesidad que tiene toda empresa de estar aumentando la productividad continuamente.
¿CUÁLES SON LAS VENTAJAS DEL COACHING EJECUTIVO?
La primera y más importante ventaja del Coaching frente a otros sistemas, es su propia condición de “uno a uno” pues el ejecutivo no se siente puesto en evidencia, como puede ocurrir en los entrenamientos en grupo, y el miedo a que su imagen quede dañada al hablar de sus dudas, desaparece. Así mismo, se desarrolla en un clima de absoluta confianza y confidencialidad.
De esta manera todos los asuntos pueden ser abordados durante una sesión de Coaching dado que se sigue un proceso totalmente personalizado, aunque por supuesto, no se descarta que algunas actividades del Coaching puedan ser efectuadas de manera Grupal.
Al tratarse de una persona externa, el coach o tutor ayuda a desarrollar una adecuada percepción de la realidad y a posicionarse desde una perspectiva más amplia y menos individual a la hora de abordar las distintas situaciones, lo que conduce a la búsqueda de soluciones desde otros puntos de vista antes no contemplados.
LO QUE OFRECE UN COACH:
Amplio y profundo conocimiento del mundo de la empresa, capacidad de crear una relación de confianza, desde la credibilidad (que sólo se consigue con honestidad), asertividad, comprensión, capacidad de análisis y de encontrar las relaciones efecto-causa que se dan en cualquier acción, así como de crear un plan de desarrollo personalizado y eficaz.
También, la capacidad de encontrar, no las respuestas adecuadas, sino las preguntas adecuadas para las distintas situaciones que pueda plantearle su cliente, capacidad para encontrar las oportunidades en las acciones pequeñas del día a día, y no en las grandes acciones empresariales y capacidad para captar y tener en cuenta las variables organizacionales que rigen la cultura en la que se encuentra la empresa, las cuales condicionan el contexto en el que puede desarrollar su actuación como Coach.
El Coach debe tener en cuenta las metas y valores personales de los ejecutivos sobre los que actúa, así como los suyos propios y, no menos importante, la capacidad de mostrarse como un modelo de confianza, comunicación, motivación y dirección.
¿Qué es el Coaching Ejecutivo?
