El Turismo pide bajar impuestos para alentar reducciones en lugar de despidos

El sector turístico español necesita una eliminación temporal de impuestos, siguiendo las medidas extraordinarias por el coronavirus que han anunciado Estados Unidos y Alemania, para alentar que las reducciones de jornada y sueldo se impongan sobre una oleada de despidos permanentes, que puede provocar una crisis económica cuya gravedad y duración puede mitigarse solo si se actúa con la máxima urgencia desde el Gobierno que preside Pedro Sánchez.

El conjunto de patronales turísticas –como son Exceltur, Cehat (hoteles), Ceav (agencias) y ALA (aerolíneas)– coincidieron de modo inédito este jueves en considerar claramente insuficientes las medidas anunciadas por el Ejecutivo para mitigar el impacto económico de paralizar durante previsiblemente cinco semanas el consumo de viajes, del cual depende de modo indirecto un cuarto del empleo del país.

Pedro Sánchez se negó a seguir la senda de la primera potencia mundial y la primera de Europa para contener una crisis económica tras superar lo peor de la pandemia del coronavirus, que ha llevado a Estados Unidos y a Alemania a suprimir impuestos con el fin de evitar que el recorte de costes obligado para las empresas se centre en los despidos, al no tener otra opción.

Estas potencias, pese a no tener una dependencia tan alta del turismo para su empleo como España, han lanzado medidas extraordinarias al entender que para las arcas públicas y la actividad económica en general es mejor reducir la recaudación fiscal puntualmente, con la meta de evitar cargarse en el futuro de una espiral de mucho más gasto por desempleo y menos ingresos por impuestos con la consecuente caída del consumo al haber más parados.

La urgencia que las asociaciones turísticas piden al Gobierno para bajar impuestos es máxima, ya que de lo contrario las empresas turísticas de todo tamaño pueden hacer la semana que viene se incrementen las listas del paro como pocas veces en tan poco tiempo, después de que ya este jueves y viernes se hayan comenzado a agilizar Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) y Expedientes de Regulación de Empleo Temporales (ERTE).

Así, al ceñirse las actuaciones del gobierno en un plan de liquidez inferior al de una crisis menor como supuso la quiebra de Thomas Cook hace medio año, las empresas también advierten de que si no se les bajan las cargas fiscales, además de despidos muchas de ellas no renovarán los contratos temporales cuando expiren, lo que les ahorra el coste de la indemnización, entre la preocupación de los agentes sociales.