Cada persona actúa y reacciona de forma diferente ante acontecimientos similares. Saber reaccionar y superar o recuperarse de las contrariedades es lo que define a las personas resilientes. Veamos cuáles son las principales características y cómo podemos desarrollar la resiliencia.
¿Qué es la resiliencia?
La resiliencia es la capacidad de las personas para hacer frente a las adversidades, superarlas y salir de ellas fortalecidos y transformados positivamente. Es decir, se trata de cómo una persona reacciona y se recuperara de las adversidades. La resiliencia se puede adquirir.
Para ello, es importante que desde pequeños eduquemos a los niños para que sean personas fuertes y responsables, enseñándoles a hacer frente a todas las contrariedades que se les puedan presentar a lo largo de su vida, tanto en el ámbito familiar, social como escolar y para que actúen con responsabilidad ante sus comportamientos.
Los padres no deben actuar resolviendo los problemas de sus hijos ni facilitándoles la solución de los mismos. Deben tener una relación en la que el niño sea capaz de contarles sus problemas o dificultades, y los padres deben escucharlos y orientarlos en la resolución de estos. Pero, han de ser los hijos quienes encuentren la solución.
Características de las personas resilientes:
- – Tienen gran capacidad para relacionarse y poseen habilidades sociales. Un gran sentido de la amistad.
- – Las personas resilientes actúan ante los conflictos con optimismo y sentido de lucha. Transforman los problemas sacando lo positivo de cada uno de ellos.
- -Convierten un trauma, un problema o una dificultad en una oportunidad de crecimiento, donde el esfuerzo y el empeño en superarlo le fortalece como ser humano.
- -Son personas capaces de superar sus miedos, temores y problemas. No se preocupan ante las dificultades, sino que son resolutivos. Identifican los problemas con rapidez y analizan las posibles soluciones. Poseen una mente activa y ágil en ese sentido.
- – Poseen gran sentido del humor. Las personas con sentido del humor, generalmente, encuentran el lado cómico en las contrariedades y suelen desdramatizar ante situaciones límites.
- – Tienen la capacidad de saber poner límites entre ellos mismos y el problema en cuestión, manteniéndose emocionalmente a distancia y procurando ser objetivos. Los niños que crecen en un entorno familiar difícil, rodeados de pobreza, alcoholismo, drogas, etc. y logran un desarrollo emocional sano y positivo, podemos definirlos como resilientes.
- Tienen una mejor autoimagen
- Se critican menos a sí mismas
- Son más optimistas
- Afrontan los retos
- Son más sanas físicamente
- Tienen más éxito en el trabajo o estudios
- Están más satisfechas con sus relaciones
- Están menos predispuestas a la depresión
¿Cómo desarrollar la resiliencia?
Existen una serie de factores quefavorecen el desarrollo de la resiliencia y, por tanto, la capacidad de respuesta de las personas o de recuperación ante situaciones adversas entre los que destacamos los siguientes:
- Buenas relaciones con familiares y amigos. Las personas que poseen buenas relaciones afectivas con sus familiares o amigos, basadas sobre todo en el amor, el respeto y la comprensión, generalmente, son personas con una gran autoestima, seguridad y confianza en ellas mismas y en su forma de enfrentarse a cualquier acontecimiento.
- La posibilidad de desarrollar y poner en práctica las habilidades sociales que poseemos, supone para cualquier persona un conocimiento de sus capacidades y una mayor seguridad en su forma de actuar y, por tanto, una ventaja en su actitud ante situaciones adversas o contrarias.
- Tener grandes responsabilidades profesionales y estar constantemente tomando decisiones importantes, es otro factor que desarrolla la resiliencia y, por tanto, permite resolver positivamente situaciones adversas en la medida de las posibilidades de cada situación.
- La creencia en uno mismo y en su capacidad y voluntad para resolver conflictos, confiar en las posibilidades de cada uno y no dejarse paralizar por el miedo o el riesgo, sino tener una actitud resolutiva y de confianza.
- Para que los niños desarrollen la resiliencia, es fundamental que cuenten con un buen entorno familiar en el que ellos se sientan queridos, valorados y escuchados, en donde sus esfuerzos sean reconocidos y se les enseñe a tomar, ellos mismos, sus propias decisiones.
¿Qué contribuye a que una persona sea más resiliente?
- El apoyo emocional es uno de los factores principales. Tener en tu vida personas que te quieren y te apoyan y en quien puedes confiar te hace mucho más resiliente que si estás solo.
- Permitirte sentir emociones intensas sin temerlas ni huir de ellas, y al mismo tiempo ser capaz de reconocer cuándo necesitas evitar sentir alguna emoción y centrar tu mente en alguna distracción.
- No huir de los problemas sino afrontarlos y buscar soluciones. Implica ver los problemas como retos que puedes superar y no como terribles amenazas.
- Tomarte tiempo para descansar y recuperar fuerzas, sabiendo lo que puedes exigirte y cuándo debes parar.
- Confiar tanto en ti mismo como en los demás.
Si te conflictúas por casi todo lo que te sucede o rodea y te cuesta trabajo encontrar solución a los problemas, no dudes en buscar apoyo psicológico, para que logres seguridad y resuelvas los conflictos de la mejor manera.