Tener un buen descanso diariamente es imprescindible para estar saludable.
Entre muchas ventajas, dormir te permite consolidar en tu memoria los nuevos conocimientos adquiridos durante el día, mejora tu concentración e incrementa tu creatividad.
Sin embargo, de acuerdo con la clínica del trastorno del sueño de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), alrededor del 35% de la población en el país sufre de irregularidades en el sueño.
Pese a que existen diversos problemas y depende de varios factores, especialistas como el jefe del Departamento de Clínicas de Salud Mental de la Universidad de Guadalajara, José de Jesús Gutiérrez Rodríguez, atribuye que la mayoría de estos padecimientos se deben tanto al estrés diario, como al uso de dispositivos móviles.
Además de estos factores, es necesario que el lugar donde duermes cuente con ciertas características que te ayuden a relajarte y dedicar el tiempo necesario a únicamente dormir.
Ante esto te compartimos cinco elementos que debes evitar que estén en tu cama, para lograr un descanso reparador y que realmente te sirva para iniciar un nuevo día con la energía suficiente.
1. Comida
Si bien consumir alimentos en la comodidad de la cama puede ser algo placentero, es antihigiénico.
Las migajas propician la formación de bacterias, ácaros e incluso atraer insectos como hormigas o cucarachas, que no te gustará tener como compañeros de cuarto.
Además estos restos de comida pueden generar malos olores, que a la larga sólo te incomodarán a la hora de dormir.
2. Tu smartphone
Científicos han descubierto que la privación crónica del sueño está vinculada al uso de dispositivos móviles, porque están ocupando minutos valiosos de sueño.
Un estudio publicado en 2014, por la revista Nature, elaborado por el profesor de la Escuela de Medicina de Harvard, el Dr. Charles A. Czeisler, reveló cómo la luz azul artificial emitida por teléfonos celulares y tabletas activa las neuronas, provocando la pérdida del sueño.
Además identificaron que permanecer conectado hasta la hora de acostarse, no sólo afecta la capacidad para quedar dormidos, sino que también perturba la calidad del sueño que se logra.
Es recomendable que dejes tu smartphone o tableta en algún lugar alejado de la cama, donde no pueda perturbarte el sonido y la luz de las ya acostumbradas notificaciones, o bien mantener apagados tus aparatos mientras duermes.
3. Libros
Expertos en el estudio del sueño aseguran que la cama debe ser utilizada sólo para dos cosas: dormir y tener sexo.
Actividades que demandan cierto esfuerzo intelectual o emocional, como leer en la cama puede afectar la calidad del sueño. En caso de que quieras relajarte antes de dormir, los especialistas recomiendan sólo leer contenidos ‘ligeros’ que no exijan mucho de tu atención y solo te ayuden a establecer una condición propicia para descansar.
4. Mascotas
Pese a que debe ser muy agradable compartir la cama con tu adorado perro o gato, este hábito puede propiciar que durante la noche tu sueño se vea interrumpido por ruidos, ladridos o movimientos constantes de tu compañero.
De hecho el 63 por ciento de los dueños de mascotas, que comparten la cama con éstas, tienen una mala calidad de sueño, de acuerdo con un estudio realizado por el centro médico de la Universidad de Kansas.
Esta investigación desarrollada en 2014, se reveló que de los 148 propietarios de mascotas que integraron el estudio, cerca del 30 por ciento reportó que son despertados al menos una vez durante la noche.
5. Trabajo
Además de que la luz que emite la laptop perjudica la calidad de tu sueño, trabajar en la cama debilita la asociación mental que debe haber respecto a que estar en tu recámara es para dormir y no para hacer otras cosas.