Existe el líder que cuenta con características del líder desde su nacimiento y otros que las adquieren, pero todos deben compartir ciertas habilidades.
Liderazgo es la capacidad que tiene una persona para influir en el comportamiento de otra persona para lograr un resultado. No obstante, aunque hay personas que traen ya ciertas características en sus genes que les “ayuda” a ser buenos líderes, definitivamente es una competencia que todos podemos aprender; una habilidad que, inclusive, podemos ir mejorando de manera continua, comenta el portal Alto Nivel.
Para lograr ser un líder existen diferentes métodos, pero lo cierto es que, si desarrollas habilidades como establecer objetivos, delegar, dar retroalimentación a grupos, crear tablas de desarrollo y evaluar desempeños, y lo haces de manera efectiva: eres un líder. Entonces el mito está en desarrollar esos comportamientos; ya que la suma de todos ellos son las características de un líder.
En definitiva, independientemente del giro y tamaño de la empresa, o si eres el presidente, director o gerente de la compañía, éstos son los 4 comportamientos/habilidades en los que tienes que trabajar:
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- Aprender a establecer objetivos.
Es indispensable que un líder sepa definir claramente qué es lo que su equipo tiene que lograr. Las encuestas de clima organizacional que se realizan en las empresas mexicanas reflejan que el 40% de los líderes sí sabe establecer objetivos, pero eso quiere decir que el 60% no. ¡De ese tamaño es la brecha! El primer paso para ser un líder es el poder establecer claramente el objetivo, y esto no consiste en enviar la descripción del puesto de trabajo que consta de actividades, si no establecer claramente qué se quiere lograr, cómo y para cuándo.
- Aprender a delegar el objetivo.
Y para delegar de manera efectiva hay 3 pasos sencillos a seguir:
- Diagnosticar el nivel de madurez del colaborador al cual se le quiere delegar cierta actividad. El diagnostico está directamente relacionado con el nivel de desarrollo que tiene cada miembro del equipo de trabajo.
- Ser flexible en la forma como se delega; es decir hay hacer a un lado el paradigma de “yo trato a todos igual”, porque lo cierto es que no es así; No tratamos a todos igual porque los tratamos en base a su nivel de madurez. El líder camaleónico es el líder que se adapta al entorno y delega en base a la madurez de su gente.
3. Generar acuerdos con los colaboradores en base a los objetivos que se quieran lograr.
- Aprender a reconocer. El reconocimiento es un espacio del alma que nunca se llena, todos necesitamos una dosis cotidiana de reconocimiento. Se trata de una necesidad emocional; todos requerimos de autoestima para ser fuertes y continuar desarrollándonos. Tenemos que aprender a dar reconocimiento a nuestra gente. Sin embargo, actualmente, considero que los líderes tienen una deficiencia muy importante en este tema. Y es todavía más grave que el no saber establecer objetivos.
En las encuestas de clima organizacional el promedio de esa habilidad a nivel mercado mexicano, refleja que el 20% de los líderes sí saben dar reconocimiento a su gente… eso quiere decir que el 80% no.
Ahora bien, cabe destacar que el reconocimiento no debe confundirse con la compensación, “es que ya le subí el salario” … No confundamos reconocimiento con compensación, son dos cosas distintas.
- Aprender a retroalimentar de manera constructiva. Es decir, cuando alguien, por ejemplo, no hace un bien trabajo tenemos que saber llamarle la atención y eso es también algo que hacemos muy mal. En este sentido, los líderes tienden a irse a cualquiera de los dos extremos, o de plano son muy blandos y no dicen lo que les tienen que decir a su equipo de trabajo cuando no logran el resultado deseado o lo hacen de una forma agresiva y ruda, logrando, inclusive, “desinstalar la autoestima” de los empleados.
Los retos del liderazgo del futuro y las características del líder
Considero que el líder del siglo XXI tiene, principalmente, dos retos o desafíos muy importantes por delante:
- Aprender a relacionarse con grupos multigeneracionales. Éste es uno de los elementos que hoy en día está jugando un papel muy importante en el terreno laboral. Las generaciones que tenemos hoy trabajando en el mundo laboral son distintas y el acercamiento con ellos, igualmente, tiene que ser diferente. El líder tiene entonces que aprender a relacionarse en entornos donde hay mujeres, hombres, heterosexuales, homosexuales, de diversas edades y generaciones… Ése es el entorno actual y el mundo va para allá. La diversidad va en aumento en las áreas laborales donde hay y cada vez va a haber más diversidad inclusive en cuanto a tipos de filosofías, ideales, valores… Antes los grupos eran más homogéneos; ahora trabajamos con personas muy diferentes a nosotros en muchos términos. El líder del futuro tiene que aprender a trabajar con gente muy diversa.
- Crear y fomentar entornos de Innovación. Hoy ya no se requiere al hombre instrumental que hace la tarea y ya, hoy se requiere al hombre integral, al hombre que piensa, que crea, que propone, que desafía, el hombre que cambia. Esto crea un entorno donde todo el mundo puede aportar ideas, y eso genera la creación de un entorno de Innovación. Ante este escenario, el líder debe encontrar, un camino/método que le permita capitalizar ese conocimiento porque, obviamente, no todas las ideas son buenas, hay también ideas malas, de ahí la importancia de saber identificar primeramente las buenas ideas y capitalizarlas para después llevar a cabo las que verdaderamente valen la pena… por lo que es todo un proceso.
Se dice fácil, pero innovar significa generar, filtrar, seleccionar, definir/decantar una idea en particular, ponerle un presupuesto, arrancarla, pilotar.
En conclusión, diría que existe un nivel importante de inconsciencia en cuanto a lo que representa el Liderazgo del siglo XXI; creo que las empresas no se están preparando para lo que viene. De hecho, son circunstancias que ya estamos viviendo y ni siquiera están en la conciencia colectiva; en ese sentido, hay un desconocimiento total, por lo que es indispensable trabajar en ello.