Por Paolo de la Fuente.
“Perder el miedo es una clave para consolidar” La historia de El Fish Fritanga Cancún, un restaurante en la zona turística con alma de locales.
Uno de los más grandes logros dentro de la economía mexicana es iniciar, desarrollar y hacer progresar una Pyme, algunas con conceptos originales y otras aprovechando oportunidades no explotadas. Este es el caso de los hermanos Aguilar Osorio, ambos cancunenses, quienes en 2004 abrieron Fish Fritanga en la zona hotelera de Cancun.
“Iniciamos con un presupuesto no mayor a $100,000 cifra impensable hoy en día para abrir un restaurante en Cancún. Juntamos recetas familiares y la experiencia de algunos chefs para presentar platillos regionales y también de estilo veracruzano” comenta Jorge.
El Fish Fritanga Cancún fue pensado originalmente para consumidores locales, gente que trabaja en hoteles, desde meseros hasta directivos a fin de que tuviesen una buena opción para comer en la zona hotelera y no gastar una fortuna. “Inesperadamente nos han visitado desde artistas y deportistas, hasta políticos y empresarios importantes pues la gente parece reconocer la calidad que buscamos impregnar en nuestro menú”.
Esta empresa se ha ganado el respeto y admiración de quienes la visitan y como resultado del arduo trabajo, han recibido por quinto año consecutivo el premio a la excelencia por parte de Trip Advisor y el Certificado Moderniza otorgado por la SECTUR.
Algo que ha caracterizado al El Fish Fritanga Cancún es el relajado estilo en sus instalaciones a la orilla de la laguna, y que han sido diseñadas para transmitir la visión de la empresa, sin pretensiones ni poses, la gente viene en sandalias a disfrutar de la vista, de un buen platillo; a meter los pies en la arena y relajarse.
El Fish Fritanga Cancún una familia incluso ante huracanes
Para estos dos empresarios su equipo de trabajo es mucho más que empleados de nómina. Con el tiempo han logrado formar una familia convencida de la visión del proyecto. Un claro ejemplo de ello, fue cuando el huracán Wilma impactó las costas de Quintana Roo a tan solo un año de la apertura del restaurante. A la semana, El Fish Fritanga se encontraba operando nuevamente, “nos quedamos sin luz, sin palapa y sin playas, y nos unimos junto con el equipo de trabajo a limpiar, y a acomodar. Cocinábamos como podíamos, incluso, a falta de licuado-ra hacíamos las salsas a mano, vendíamos lo que se podía preparar en el menú”.
Por quinto año consecutivo, El Fish Fritanga Cancún recibió el premio a la excelencia por parte de Trip Advisor y el Certificado Moderniza otorgado por la SECTUR
Ambos empresarios consideran necesario brindar mayores incentivos para Pymes, así como simplificar la tramitología, esto es, que se eficiente la gestión de permisos y pagos para de esta forma, facilitar la actividad empresarial en el estado. Así mismo, destacan que una fuerte afectación es la competencia desleal de los ‘todo incluido’ y la apertura de supermercados en la zona hotelera que, en su opinión, debería también regularse para equilibrar el panorama empresarial local.
“A pesar de cualquier adversidad, algo que aprendimos en El Fish Fritanga Cancún fue a perder el miedo a todo: trabas gubernamentales, trámites, desafíos y hasta la competencia desleal.
Consideramos que esta es la clave para lograr el éxito progresivo y consolidar tu empresa.” Trabajar bajo esta filosofía les ha permitido a los hermanos Aguilar Osorio constatar cómo la temporada baja no les afecta al grado que tengan que reducir su nómina. “Logramos emprender en pequeño siempre pensando en grande”.
Este año El Fish Fritanga Cancún planea abrir su segunda sucursal, lo que comienza un modelo de franquicias que seguramente será acompañado por la perseverancia y dedicación de estos exitosos hermanos empresarios.
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