El musgo ayuda a disminuir la erosión del suelo y la contaminación ambiental, mientras que el heno aumenta la humedad relativa de los bosques
Con el penúltimo mes del año a punto de concluir, las calles, locales y hogares, cambian radicalmente la decoración alusiva a las festividades de Día de Muertos, para dar paso a los brillantes arreglos y luces de colores que caracteriza la Navidad.
La venta de los tradicionales árboles de navidad empieza a visibilizarse en los bazares, al igual que las bebidas típicas como el ponche y una gran variedad de dulces, postres y comida. Entre las decoraciones que no pueden faltar para inundar nuestro hogar de espíritu navideño son, arreglos a base de muérdago y el pesebre navideño, también conocido como la representación del nacimiento de Jesucristo, en diferentes religiones.
Como parte de los elementos que se implementan en dicha representación del nacimiento, se encuentran el musgo (principalmente Thuidium delicatulum) y heno, productos vegetales de gran importancia ecológica.
Sin embargo, las autoridades en conjunto con especialistas, biólogos y ambientalistas, se han dado a la tarea de informar a la sociedad sobre la importancia biológica de estos organismos vegetales para los ecosistemas y por qué no se debe fomentar su compra en esta época del año.
¿Por qué no se debe de comprar musgo y heno para las decoraciones navideñas?
La NOM-011-SEMARNAT-1996, es una normativa que implementa técnicas del buen uso y extracción de este recurso de los bosques en México, sin embargo, pocas personas llevan a cabo una buena práctica.
La mayoría de los comerciantes, realizan una extracción del musgo y heno sin previos planes de manejo que permita su recuperación en el hábitat, generando un alto impacto ambiental, por lo que pueden incurrir en una venta ilegal, dado que estas especies vegetales se encuentran bajo protección.
La Ley General de Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente (LGEEPA), señala que está prohibida la extracción de cualquier especie o material de los bosques que no cuenten con un permiso y un programa de manejo.
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¿Por qué es importante el musgo y el heno?
Los musgos son plantas pequeñas que carecen de tejidos y se denominan como Bryophytas. Ofertan importantes servicios ecológicos que benefician directamente a los organismos de los sitios donde se encuentran y al ser humano, ayudando a disminuir la erosión del suelo y la contaminación ambiental.
También ayudan a la filtración del agua al suelo, germinación de flora, y son microhábitats para gran cantidad de animales, entre los cuales podemos encontrar insectos, arácnidos, rotíferos, nematodos, moluscos y anélidos.
Mientras que el heno ayuda a mantener la humedad de los bosques y a limpiar el aire al capturar partículas contaminantes en sus diminutas vellosidades (tricomas).
Otro de los servicios ecosistémicos del musgo y el heno es que, sirven para la formación de nidos de diferentes aves, entre ellas, uno de los polinizadores más conocidos, el colibrí.
Ambas plantas entran en la clasificación de recursos forestales no maderables y se ve un incremento de su explotación en época navideña, dónde son extraídos de las cortezas de los árboles (principalmente) y ofertados aun bajo costo en bazares y mercados.
De acuerdo con la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), «son el segundo grupo más importante dentro de las plantas verdes y unos de los primeros organismos vegetales que ocuparon el ambiente terrestre. A nivel mundial se reconocen alrededor de 12,800 especies. En México se reconocen 980 especies de musgos, de las cuales 106 especies son endémicas a nuestro país, el equivalente al 10.8%».
La gran diversidad de estas especies puede comprometerse con la extracción excesiva que se lleva año con año. Contribuir en la compra de musgo y heno, es contribuir en su extracción ilegal de los bosques, destruyendo el hábitat de un sinnúmero de flora y fauna. En esta temporada navideña, te invitamos a sustituir estos productos por otros que no generen un alto impacto en la naturaleza.
