Cómo tener discusiones más constructivas (y ganarlas)

No es con quién estás discutiendo sino cómo estás discutiendo. ¿Quieres aprender a discutir mejor? Aquí te damos diez consejos para ganar tu próxima discusión.

 

1. Escucha lo que la otra persona tiene que decir

“¡Yo lo dije primero y más alto!”

En el momento más álgido de la discusión y desesperados por expresar nuestro punto de vista a menudo nos negamos a escuchar otras opiniones.

Pero no deberías ignorar lo que tu oponente tiene que decir.

“Solemos asumir que el otro punto de vista es totalmente inválido y no hace falta reconocerlo”, dice Claire Fox, directora del Academy of Ideas de Londres.

Pero, por supuesto, todo argumento tiene al menos dos puntos de vista.

Si escuchas a tu oponente puedes adquirir nuevos conocimientos además de refinar y mejorar tu propia posición.

2. Intenta demostrar empatía

Tal vez provocar a tu oponente no sea la mejor estrategia

No es sólo importante que escuches a tu oponente: también tienes que intentar empatizar con lo que dice.

Kris De Meyer, neurocientífico en el King’s College de Londres, dice que a menudo “las personas escogen una posición y se afianzan en ese punto de vista” y así la discusión “termina convirtiéndose en un enfrentamiento”.

Pero esto se puede evitar de una manera muy sencilla: demostrando empatía.

“Deberíamos partir de la premisa de que las personas con las que no estamos de acuerdo son como nosotros”, dice Claire Fox.

“Intenta averiguar por qué piensan lo que piensan, y quién sabe, puede que hasta cambies de opinión”.

3. Repite lo que ha dicho la otra persona

Antes de ponerte a discutir cerciórate de que has escuchado correctamente. “A menudo los desacuerdos escalan de intensidad debido a un malentendido”, dice Kris De Meyer.

Pero hay una manera inteligente de evitar esto: “Repite lo que crees que la otra persona acaba de decir hasta que la otra persona confirme que eso es lo que ha dicho”, aconseja el neurocientífico. “Este tipo de repeticiones puede ayudarnos a evitar malentendidos”.

4. Reconoce un potencial conflicto lo antes posible

Intenta aliviar la tensión con algo de humor. “Detecta conflictos incipientes lo antes posible”, dice Liz Stokoe, profesora de interacciones sociales en la universidad de Loughborough en Inglaterra.

La profesora asegura que lo mejor es actuar lo más rápido posible, antes que las posiciones en ambos lados se vuelvan inamovibles.

Y si tienes un enfrentamiento con alguna persona lo mejor es responder de una forma alegre y educada para aliviar la tensión.

5. Averigua en qué estás de acuerdo

“Si no nos ponemos de acuerdo en unos valores básicos entonces no podemos tener ningún tipo de discusión”, dice Clare Chambers, profesora de filosofía política en Cambridge.

La profesora explica que vale la pena dedicar algo de tiempo a averiguar qué principios compartes cuando estás involucrado en un desacuerdo.

“Cuanto más precisos seamos sobre lo que estamos en desacuerdo y sobre lo que estamos de acuerdo mejor irá el debate”, dice.

6. Sal de tu zona de confort

Puede resultar duro, pero aprenderás mucho más si sales de tu zona de confort. Amy Gallo es experta en dinámica de trabajo y ayuda a compañeros de trabajo a tener discusiones y debates constructivos.

Aconseja a las personas a que tengan conversaciones incómodas, porque “el lugar donde te sientes incómodo es donde cambian las perspectivas…y donde las personas se abren a nuevas ideas”. Así que salir de tu zona de confort te permite ser más creativo y te anima a ver las cosas de manera distinta.

7. No te lo tomes como algo personal

No pasa nada por discutir, pero intenta no insultar a tu oponente.

Discutir no tiene por qué ser desagradable. De hecho, para tener un debate constructivo es necesario evitar los descalificativos personales.

Las redes sociales están llenas de insultos y descalificativos pero esto se debería evitar en las discusiones.

Jonathan Rauch, del Instituto Brookings en Washington, dice que su lema es simple: “Ataca el argumento, no a la persona”.

8. Sé racional, no emocional

Piensa antes de hablar y asegúrate de que sea relevante para el tema en cuestión. Piensa antes de hablar, respira profundamente e intenta abordar la discusión de manera racional.

Deborah Fisher, profesora de Astronomía de la universidad de Yale, dice que podemos aprender mucho de las discusiones entre científicos.

“Los científicos no se aferran emocionalmente a su idea de lo que es real o verdad”, dice. “También permiten que los buenos argumentos cambien su opinión”.

9. Sospecha de ti mismo

¿Crees que siempre tienes la razón? “Aprende a sospechar de ti mismo”, dice Jonathan Rauch.

“Sólo porque estás seguro de que tienes razón no significa que tengas razón”. La profesora de filosofía Clare Chambers está de acuerdo: “Cuestiónate a ti mismo y reconoce los límites de tu posición”.

10. Admite cuando estás equivocado.

Aprende a decir “lo siento” cuando te equivocas. Una parte inevitable de discutir es aceptar que a veces vas a estar equivocado.

“Admitir que te has equivocado muestra coraje y madurez”, dice Geoff Mulgan, CEO de Nesta, una fundación que promueve la innovación global. “Ninguno de nosotros debería sentirse mal por habernos equivocado en algo”.

11. Sé un buen ganador

Y por último -aunque no por eso menos importante- es importante ser buen ganador cuando derrotas a tu oponente.

“La forma en la que tratamos a los demás tras una victoria es muy importante”, dice Jon O’Brien, presidente de Catholics for Choice, un grupo de defensa católica disidente con sede en Washington.

“La tolerancia no significa que nos guste quedar con personas que están de acuerdo con nosotros. La tolerancia es estar con alguien con quien no estás de acuerdo”, dice Jon.

Con información de BBC News Mundo