Economía Colaborativa: fomenta consumo alternativo

Tendencia que ha generado un cambio histórico en el mundo

El avance en Internet y las nuevas tecnologías han impulsado modelos de consumo alternativo en los últimos años. La relación entre quien ofrece un producto y quien tiene una necesidad concreta está cambiando de manera significativa. Esto se denomina la “ECONOMIA COLABORATIVA”, la cual se basa en prestar, alquilar, comprar o vender productos en función de necesidades específicas y no tanto en beneficios económicos mediante plataformas digitales, de hecho, bajo este esquema es posible que el dinero no sea el único valor de cambio para las transacciones. 
Está tendencia está generando un cambio histórico relevante que  desde luego por el gran crecimiento, existen confusiones en su aplicación pues modifica aspectos no solo económicos, sino en lo social, ambiental y cultural.
La economía colaborativa señala: “No necesito de la ayuda ni el involucramiento del regulador, por lo que no quiero intermediarios ni pagar impuestos en un simple trueque.”
El motor de la economía colaborativa es el aprovechamiento de activos subutilizados, por ejemplo un coche, una casa, un espacio de oficina, tu conocimiento (freelancers) o tu tiempo. En este sistema el concepto de “comunidad”, es esencial, ya  que las empresas dentro de esta categoría reúne personas con intereses comunes y frecuentemente locales.
Principales beneficios de la economía colaborativa:

  • El ahorro. Evita intermediarios y posibilidad de intercambio de bienes.
  • Desarrollo sostenible. Estimula el segundo uso de los productos. Lo que alguien ya no necesita, puede tener un nuevo destinatario en alguna red de contactos. Se aboga por un consumo moderado.
  • Compartir. Un  ejemplo son los coches de carretera, que pueden servir para llevar a varios pasajeros con destinos próximos.
  • Mayor oferta. Los productos con un segundo uso y los servicios compartidos amplían la oferta de los mercados tradicionales.
  • Beneficio medioambiental. La reutilización y los servicios compartidos son una buena manera. Se promociona la cultura de reciclaje.
  • Compartir conocimiento. Existe en Internet una gran cantidad de software de código abierto, que va desde sistemas operativos como Linux, sistemas ERP como Weberp u opentaps, plataformas como Ouishare, accesibles de manera universal que promueven la economía colaborativa y el conocimiento.


De acuerdo al simposio llevado a cabo en la Máxima Casa de Estudios (UNAM) en el mes de mayo del año 2016, dentro del XXI Congreso Internacional de Contaduría e Informativa, se dieron varias definiciones de “economía colaborativa” por diversos economistas internacionales. Coincidieron en términos de la compartición, procomún y los procesos de igual a igual.
En este congreso se abordaron los nuevos sistemas económicos  denominados  “híbridos“ que son una mezcla de sistema capitalista y de un procumún colaborativo impulsado por el internet y el ánimo de los consumidores  de participar en forma directa, derivado de la crítica del consumismo y una cultura de desecho y desperdicio, generado por la  mercadotecnia del consumo.
En este compendio, se señaló que existen tres tipos de sistema de economía colaborativa:

  1. El servicio de productos, compartiendo el uso y no la posesión, como el sistema de Ecobici de la Cd. de México y el conocido AirB&B.
  2. Mercados de redistribución, transmisión de bienes usado entre usuarios, Reciclar, Redistribuir, Reparar y Reutilizar, como es el caso del “mercado libre y segunda mano”, que hoy por hoy así como Amazon son las principales comercializadoras del mundo que no cuentan con inventarios.
  3. Estilos de vida colaborativos, intercambio de cosas, servicios de capacidades personales o grupales, tiempo, espacio o dinero, como es al caso de UBER. Así como Microjobs, donde se reúnen oferentes y demandantes de trabajos temporales de oficios sencillos.

Asimismo existen las siguientes clasificaciones:
a) Consumo colaborativo: Utiliza plataformas digitales a través de las cuales los usuarios se ponen en contacto para intercambiar bienes o artículos, casi todos de forma gratuita y altruista (ejemplo:  Markeplace de Facebook); b) Conocimiento abierto: Son todas aquellas modalidades que promueven la difusión del conocimiento sin barreras legales o administrativas. Pueden presentarse en el día a día o a través de plataformas informáticas a las que acuden usuarios con necesidades; c) Producción colaborativa: Se trata de redes de interacción digital que promueven la difusión de proyectos o servicios de todo tipo; d) Finanzas colaborativas: Microcréditos, préstamos, ahorros, donaciones y vías de financiación se incluyen en este subgrupo de la economía colaborativa.  En esta categoría entran plataformas como Konfío Kubo o Doopla, en las que hay una persona común y corriente que invierte su dinero para dar el préstamo a otra persona. También puede ser persona-empresa (como Indiegogo), empresa-empresa o empresa-persona. La plataforma hace posible el contacto y “regula” que haya seguridad en la transacción.
Esta economía impulsado por el  trueque. En tiempos de inestabilidad económica o de devaluación de la moneda, puede ser una excelente manera de garantizar el flujo de artículos y servicios necesarios a su hogar sin utilizar fondos preciosos. Históricamente, los intercambios o trueques cara a cara entre partes familiares eran los más comunes, pero Internet ha abierto un nuevo medio para el intercambio de oportunidades.
Estos son algunos de los bienes más populares que se pueden intercambiar y en la que existe cantidades de páginas de internet, como las siguientes:
1 Home Exchange (cambio de casas temporal); 2 CouchSurfing (alojamiento gratis); 3 AirB&B (alojamiento con costo); 4 GoSwap (intercambio de casas permanente); 5 LiquidSpace (oficinas virtuales); 6 SwapStyle (ropa de moda); 7 ThredUP (ropa usada de niños); 8 RehashClothes (ropa y accesorios); 9 Zwaggle (muebles, ropa y accesorios de niños); 10 Baby Sitter Exchange (Niñeras); 11 Zip Car y Connect By Hertz (uso temporal de automóviles, incluso por horas y compartido); 12 Capital Bikeshare (membresía para uso de bicis); 13 Bookins, PaperBack Swap y BookMooch (intercambio y regalo de libros); 14 Gametz y  Goozex (intercambio de videojuegos y otros); 15 SharedEarth (Intercambio de tierras por jardineros y agricultores); 16 NeighborGoods (compartir o alquiler maquinaria y equipo por horas); 17 Craiglist (Es de las empresas pioneras en economía compartida y existe antes de Google. Es la página de anuncios clasificados más conocida); 18 TrashBank (compraventa de antigüedades y juguetes) 19 SwapTreasures (intercambio de bienes y servicios); Barter Quest (un sitio de trueque más grande); 20 U-Exchange (intercambio de bienes y servicios con costo para el anunciante) y; 21 FavorPals (Intercambio de servicios sencillos). 22 BizXchange es para el trueque de empresa a empresa, donde los miembros usan “dólares de BizX” para ayudarse mutuamente a ahorrar dinero en gastos y encontrar nuevas formas de hacer crecer sus negocios. Los dólares de BizX se ganan (y se pueden gastar en) vender productos, servicios o inventarios no utilizados a otros miembros. 
Ya existen algunas empresas tecnológicas mexicanas que ofrecen el servicio de intermediarios entre oferentes y demandantes de bienes y servicios sin movimientos de efectivo; sin embargo consideramos que estas aún no ofrecen una seguridad de entrega satisfactoria de los bienes, así como la confidencialidad de información. Amigo lector, he aquí una oportunidad de negocio.
Para efectos fiscales es importante recordar que el trueque se considera un ingreso para la persona que cede el bien u otorga el servicio, por lo que se deben facturar y reclamar las contrapartes a valores de mercado razonables y justos mediante convenios de COMPENSACIÓN, para que se considere cobrado y pagado respectivamente, pudiéndose generaran utilidades o pérdidas en dichos trueques. Para el caso de Quintana Roo, ya hemos visto que han frenado este tipo de economía: como UBER y ahora con la posibilidad de requerir a todos los que ofrecen AirB&B licencia de funcionamiento, pago del impuesto al hospedaje y probablemente posteriormente les requieran el pago del impuesto sobre la renta (ISR) y del impuesto al valor agregado (IVA).
Paralelamente el 9 de marzo del 2018, se publicó en el Diario Oficial de la Federación, la Ley para Regular las Instituciones de Tecnología Financiera, denominada “Ley Fintech”, cuyo objetivo es que los intermediarios que ofrecen plataformas digitales para conectar compradores y vendedores, incluyendo el uso de las criptomonedas, identifiquen a sus oferentes y demandantes, para evitar lavado de dinero y financiamiento a actividades terroristas, verificar que el uso de recursos se aplique adecuadamente y desde luego, enviar información al Servicio de Administración Tributaria (SAT) para el pago de impuestos. 
Si usted, va iniciar este tipo de economía, le sugerimos tomar en consideración algunas recomendaciones: a) Siempre sea inquisitivo; b)  Solo publique lo que está dispuesto a intercambiar, incluyendo los servicios profesionales que puede proporcionar, c) Sea escéptico las personas pueden ofrecer servicios profesionales, incluso legales o médicos, que no parecen ser legítimos; d) Transacciones artículos de prueba para asegurarse de que funcionan. Pero recuerda, no hay garantías.
¿Ha tenido algún éxito el trueque? ¿Qué consejos o sugerencias tienes para intercambiar con éxito?
Esperemos que en corto plazo, contar con empresas mexicanas dedicadas al intercambio de bienes y servicios. Lo importante es que funcionen a través de un sistema que reúne empresas que comercian entre sí, pagando con los bienes y servicios que ellos mismos ofrecen, mediante una adecuada coordinación y regulación, claro está; ello tiene que desarrollarse con un aumento de la educación y respecto de los oferentes y demandantes.  
Estos sistemas funcionan en los principales países del mundo en donde gracias a su cultura económica saben aprovechar los beneficios. En el ámbito mundial un porcentaje mayor al 35% de las 500 empresas más importantes del mundo que aparecen en la revista Fortune tienen a estos sistemas como parte normal de sus operaciones.