Eutanasia. La Asamblea Constituyente de la Ciudad de México aprobó por 56 votos a favor, 27 en contra y una abstención, el derecho de las personas a una muerte digna, es decir a la Eutanasia Activa. Consiste en causar la muerte de un paciente en sus últimos momentos para evitar un sufrimiento prolongado por razones humanitarias.
En la capital del país ya existe desde 2008 la Ley de Voluntad Anticipada por que permite a pacientes terminales renunciar a tratamientos y medicamentos que les prolonguen la vida artificialmente. Se conoce como Eutanasia Pasiva y también está despenalizada en Italia, España, Noruega, Dinamarca, Alemania y Austria.
En Europa la Eutanasia es legal en Holanda desde 2001, Bélgica 2002 y Luxemburgo 2008. En Suiza está prohibida, pero se permite el Suicidio Asistido que es cuando el médico proporciona al paciente terminal una dosis letal que se suministra por sus propios medios.
Eutanasia. En América Latina, es más reciente. En Colombia existe una ley desde 1997 pero apenas en el 2015 se reglamentó por orden constitucional ocurriendo su primera aplicación en un hombre de 79 años con cáncer terminal. En ocasiones un suceso ha dado origen a su aprobación como el caso de la bebé Camila en Argentina.
Una hipoxia cerebral en 2009 le impidió respirar durante el parto y entró en coma; vivió 3 años conectada a un respirador, alimentada artificialmente. Los médicos se negaban a desconectarla y su madre luchó públicamente por un cambio en la legislación.
En mayo del 2012 el Senado aprobó la Ley 26.742 sobre derechos de paciente y un mes después Camila fue desconectada. En los Estados Unidos sólo en 5 estados se permite el Suicidio Asistido: Washington, Montana, Nuevo México, Vermont y Oregon donde Britanny Maynard de 29 años, con Cáncer Terminal y pronósticos de pocos meses de vida, se trasladó de su ciudad a Oregon para que se le practicara caso que atrajo la oposición del Vaticano.
Frente al temor de que la legalización de estas prácticas puede permitir que un elevado número de personas se quite la vida, En un estudio hecho en Holanda en 2012 se encontró que las tasas de muerte por eutanasia fueron las mismas 10 años antes de la legalización que 10 años después.
Además del reconocimiento a una muerte digna, lo crucial será sentar los mecanismos en las leyes respectivas para que la medida se utilice exclusivamente por quienes tengan la voluntad y el imperioso derecho de hacerlo.
¿QUÉ ES LA EUTANASIA?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la eutanasia como aquella “acción del médico que provoca deliberadamente la muerte del paciente”. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) las de- finiciones existentes sobre la eutanasia no son exactas y pueden variar de una persona a otra, pero tienen varios elementos en común. La mayoría de los comentaristas restringe su descripción a la eutanasia directa o ‘activa’, que se puede definir como “el acto deliberado de poner fin a la vida, a petición propia o de algún familiar”
Eutanasia: ¿Muerte digna o asesinato?
El suicidio medicamente asistido se podría definir como “la ayuda que da un médico a un paciente, en respuesta a su solicitud, proporcionándole los medios para suicidarse y es el paciente quien realiza la acción final que causa la muerte”2
La voluntad anticipada es un concepto de índole más ge- neral que los dos anteriores y se puede entender como “el proceso mediante el cual una persona planifica los tratamientos y cuidados de salud que desea recibir o re- chazar en el futuro, en particular para el momento en que no sea capaz por sí misma de tomar decisiones”.3
En México está prohibida la práctica de la eutanasia y del suicidio medicamente asistido, de acuerdo a lo estipulado en la Ley General de Salud en su artículo 161 Bis 21 que a la letra dice: “Queda prohibida, la práctica de la eutanasia, entendida como homicidio por piedad así como el suicidio asistido conforme lo señala el Código Penal Federal, bajo el amparo de esta ley.”
