Google “puso fin” a su controvertido plan de lanzar un buscador censurado en China, afirmó recientemente un ejecutivo de la compañía.
Ya hubo reportes el año pasado de que la empresa había cesado en su empeño, pero otros rumores apuntaban a que el proyecto continuaba activo.
“Hemos puesto fin al Proyecto Dragonfly”, declaró el ejecutivo de Google Karan Bhatia frente al Comité Judicial del Senado de Estados Unidos.
Según Buzzfeed, uno de los medios que reportó estas declaraciones, se trata de la primera confirmación pública de que Dragonfly ha sido clausurado.
Un portavoz de Google declaró posteriormente que la empresa no tiene ningún plan para lanzar un buscador en el país asiático.
“Dudas morales y éticas”
Dragonfly recibió multitud de críticas por si pudiera ser una potencial herramienta que usaran las autoridades chinas para censurar el contenido en internet y monitorear el comportamiento online de sus ciudadanos.
En 2018, un exempleado de Google alertó de los planes “alarmantes” de la empresa en China en una carta enviada a los legisladores de Estados Unidos.
Jack Poulson, quien había sido investigador sénior de la empresa hasta su renuncia en agosto de ese año, escribió en la misiva que tenía miedo de las ambiciones de Google.
En la carta, alegaba que Google estaba trabajando, entre otras cosas, en una lista negra de censura desarrollada según las exigencias del gobierno chino.
Cientos de empleados de Google enviaron entonces otra carta a la empresa en la que afirmaban que el proyecto generaba “dudas urgentes morales y éticas”.
A pesar del aumento de la presión pública sobre la empresa. sin embargo, a finales de 2018 Google todavía parecía tener reticencias a la hora de confirmar que el desarrollo del buscador se había detenido,
El trabajo en el proyecto en aquel momento era “limitado”, le dijo el ejecutivo jefe de Google, Sundar Pichai, al mismo comité del Senado de Estados Unidos en diciembre de ese año.
Según documentos obtenidos por la página web de investigación The Intercept, Dragonfly fue lanzado como proyecto en la primavera de 2017.
Los documentos sugerían también que los ingenieros de Google estaban trabajando en formas de filtrar páginas web, incluidas las de la BBC y Wikipedia, de los resultados de búsqueda.
Los chinos ya tuvieron acceso a una versión censurada de Google entre 2006 y 2010, pero la empresa decidió cerrar esa operación en el gigante asiático por la censura y tras denunciar al gobierno de hackear sus servidores.
Con información de BBC