Las 5 habilidades que debes desarrollar antes de emprender

Existen algunos tipos de inteligencias y habilidades que podríamos desarrollar y usar a nuestro favor.

Si bien existen varias habilidades que adquirimos a lo largo de nuestra carrera profesional, hay otras que no solo nos ayudarán a conseguir nuestros objetivos sino que además nos facilitarán la tarea de emprender y no fracasar en el intento. Como la vida es un aprendizaje constante, todos los días estamos expuestos a aprender algo nuevo, y que mejor que sean habilidades que contribuyan a nuestro crecimiento tanto personal como profesional, comenta el portal Entrepreneur.

De acuerdo con Howard Gardner y su libro Inteligencias múltiples, existen algunos tipos de habilidades blandas o soft skills que podríamos desarrollar y usar a nuestro favor, en especial aquellas que tienen que ver con las relaciones interpersonales pero también con la relación que tenemos con nosotros mismos, a continuación te lo explico.

Para saber más: 16 Lecciones que todo emprendedor debería aprender antes de Iniciar un Negocio

Comunicación efectiva

Las relaciones interpersonales, son aquellas que se representan cuando interactuamos con otras personas, debido a que cada uno de nosotros posee una forma particular de ver el mundo, algunas veces esto puede ocasionar conflictos, en parte creados por la falta de tolerancia o compresión de las ideas de la otra persona, pero muchas veces debido a la incapacidad para formar acuerdos que satisfagan a ambas partes.

  • Consejo: Se dice que tenemos dos orejas y una boca porque debemos de escuchar más de lo que hablamos, así que aprende a escuchar a tu contraparte, te sorprendería la cantidad de problemas que surgen debido a que no se tomó en cuenta la opinión de la otra persona o solo se escuchó parte de lo que tenía que decir. Permite que la comunicación fluya en ambos sentidos, jamás obtendrás una retroalimentación efectiva si no permites que te la den, jamás escucharás una buena idea si continúas interrumpiendo y siempre tendrás un caos mental, hasta que no logres escucharte a ti mismo.

Trabajo en equipo

Nos han enseñado que el trabajo en equipo no es otra cosa que varias personas haciendo una parte de algo para cumplir con una actividad en particular, pero nada más alejado de la realidad porque el trabajo en equipo se encuentra íntimamente ligado a la comunicación efectiva, y hay que visualizar al mismo como una máquina, en que cada una de las partes del mismo es indispensable para su buen funcionamiento.

No sólo se trata de repartir tareas, para el líder en formación representa la oportunidad perfecta para delegar tareas basándose en las fortalezas y áreas de oportunidad de cada uno de sus integrantes, así como poder supervisar el trabajo de cada uno de ellos, permitirles fallar pero también aprender de sus errores.

Desarrollo de habilidades
  • Consejo: La única ocupación del líder deberá estar encaminada a encontrar a esas personas hambrientas de más, a descubrir ese talento oculto que cuenta con el potencial suficiente para conseguir una meta tras otra, que sea fuente de inspiración para otras personas y que tenga la sabiduría suficiente para confiar en que los integrantes de su equipo de trabajo sepan tomar buenas decisiones, evitando con esto convertirse en un cuello de botella, como lo menciona Carlos Muñoz en su curso de Halcones de venta.

Procura desarrollar un liderazgo que se contagie al resto de tus colaboradores, con esto en mente, podrás observar que pequeños cambios traen como consecuencia grandes resultados para todos ustedes.

Crítica

Es común ver que cuando las cosas no marchan bien, muchos de nosotros culpamos a los demás o a las circunstancias.

En 2018, la excampeona de España de natación, cantante y actriz Miriam Fernández, subió al escenario de TED y se presentó antes todos los asistentes con un carro andador para apoyar su caminar, ella explicó que hubo un momento en su vida en que culpaba a todos por su condición resultante de una parálisis cerebral, hasta que se dio cuenta de que al apuntar a la persona que era objeto de sus reclamos, eran más los dedos de su mano que apuntaban hacia a ella que a la otra persona.

Después de este hecho, se replanteó su manera de pensar totalmente y descubrió que si contenía el impulso de culpar a los demás y lo convertía en una crítica hacia ella misma, las cosas cambiaban, fue un trabajo duro al principio pero con el tiempo la llevó a descubrirse a sí misma, a aceptar su condición e incluso a ver los beneficios y sacar provecho de ellos.

  • Consejo: Cuando tengas el impulso de culpar a alguien o algo más, tómate un respiro y por un momento reflexiona qué pasaría si todos esos pensamientos los dirigieras hacia ti y no hacia los demás, este ejercicio de introspección, te ayudará a lograr una crítica constructiva que te permita mejorar y evitar volver a cometer los mismos errores. Gandhi decía “Sé el cambio que quieras ver en el mundo”, y cuando te permites cambiar, todo tu mundo cambia también, pero de ti dependerá la decisión de si es para bien o para mal, cualquier camino que elijas afectará a tu equipo, así que piénsalo bien.

Resiliencia

Esta no es sólo una habilidad aislada sino un paquete que trae consigo muchas otras más, cuales son algunas de ellas se empiezan a vislumbrar con la definición que nos ofrece el diccionario de la RAE, la cual menciona que es la capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos.

El concepto de resiliencia en psicología engloba no solo la capacidad de afrontar las crisis o situaciones potencialmente traumáticas, sino también la capacidad para salir fortalecidos de ellas.

Según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas y Geografía (INEGI), el 75% de pymes cierran en un lapso menor a dos años, y proyectado a 10 años, se reduce el cierre al 10%. En el Foro Forbes: “El nuevo mundo de las franquicias”, Leticia Gasca, directora ejecutiva del Failure Institute, mencionó que “la resiliencia es cómo te recuperas, no cómo te resistes a los cambios”.

Por ello las mejores empresas resilientes, son aquellas en las cuales sus trabajadores también lo son, puesto que es más fácil de esta manera sacar provecho de los reveses que se puedan tener, entendiendo que el éxito no es una meta, sino un proceso que se vive todos los días, fortaleciendo el aprendizaje.

  • Consejo: A continuación, te dejo una lista de cinco cosas para desarrollar esta habilidad:
  1. Adoptar una actitud positiva: Una investigación dirigida por José Luis Herrero del Instituto Feinstein para la Investigación Médica de Nueva York, demostraron cómo los diferentes tipos de respiración influyen sobre el funcionamiento de distintas zonas del cerebro.
  2. Concluyendo que si bien la mente controla al cuerpo, la respiración lo hace a la mente. Así que ya sabes, solo respira profundo y cuenta hasta 10, será un gran y sencillo reinicio para ti.
  3. Ser realista: Te mantendrá con los pies en la tierra evitando ser catastrofista, aceptar el momento actual es solo el primer paso para superar esta situación. Se trata de poder ver el contexto general para proponer soluciones y lograr conseguir un poco más de optimismo.
  4. Ten sentido del humor: Ayudará a quitarle peso emocional a la situación y te permitirá ver la situación desde distintos puntos de vista, lo que facilitará el encontrar alguna solución.
  5. Márcate objetivos: Como lo menciona William H. McRaven en su libro Tiende tu cama y otros pequeños hábitos que cambiarán tu vida y el mundo, el establecer pequeñas metas e irlas cumpliendo poco a poco, será el principio de tu plan de ejecución que te ayudarán a lograr cosas más grandes y esto se traducirá en resultados que mejorarán notablemente tu estado de ánimo.

Administración

Te será indispensable desde lo personal hasta lo empresarial, para practicar a pequeña escala podrás empezar a gestionar tus propios recursos de manera más eficiente, y no solo me refiero a lo económico, puesto que se puede ocupar para un gran número de cosas.

Si tu imaginación estaba empolvada, aquí es donde la pondrás a prueba al idear estrategias que permitan lograr una mayor rentabilidad y crecimiento del negocio.

  • Consejo: Comienza leyendo y estudiando las historias de éxito de las grandes empresas, pero no te olvides de investigar un poco sobre aquellas pymes que lograron sobrevivir a su periodo de fracaso del sector en específico al cual te quieres incorporar. Esto te facilitará la tarea de poder copiar e implementar estrategias comerciales que otros ya han puesto en marcha, tú no sabes si pudiera resultarte hasta que lo compruebes por ti mismo ante tu mercado.

Esta lista de habilidades básicas puede extenderse mucho más allá, pero es un comienzo sobre el cual puedes trabajar, ten en mente lo que dijo Alfred de Musset: lo realmente importante no es llegar a la cima; sino saber mantenerse en ella.

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