En este panorama, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, alertó que un mes más en casa “es todo un reto” en cuanto a la prevención de la violencia intrafamiliar, por lo cual se requiere fortalecer los servicios para las familias.
Durante una videoconferencia con funcionarias y funcionarios de organismos vinculados a la atención a la mujer y las familias, indicó que si bien no hay cifras validadas, algunos datos muestran un aumento de llamadas de auxilio.
Información de los servicios de emergencia 911 y del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México – citados por Gobernación- muestran que la mayoría de las solicitudes de apoyo son de mujeres y se calcula que 66 por ciento surgen por presuntos casos de violencia física y 22 por ciento, psicoemocional.
El consejo ciudadano dijo que el aumento es del 120 por ciento en el registro de llamadas, respecto al registro de marzo pasado, y hay una importante cantidad de reportes de mujeres que advierten la combinación de violencia y el consumo de alcohol, así como “la frustración sobre lo económico, laboral e incertidumbre que deriva en violencia física”.
La secretaria Sánchez Cordero alertó al respecto: “Nos falta otro tramo, tal vez más difícil y tal vez más crucial que en el que estamos en este momento, precisamente porque un mes más de distancia obligada, de convivencia, de autoconfinamiento en las casas puede provocar algunas situaciones que estamos nosotros tratando de visualizar y, por supuesto, que nuestro tema debe ser prevenir”.
La medida de aislamiento social significa un momento crucial porque un mes más en casa es todo un reto para todas las instituciones que tenemos la prioridad de la prevención de la violencia.
Subrayó que la ampliación del confinamiento a causa de la pandemia por Covid-19 demanda también una mayor difusión de medidas preventivas y de acceso a servicios con calidad y eficiencia, especialmente para niñas, niños, adolescentes, adultos mayores y personas embarazadas.