Muchas veces en nuestra vida personal o profesional estamos enfrentados a situaciones que nos exigen sacar lo mejor de nosotros, tomar decisiones correctas, hacer cambios, superar metas o motivar a los demás .
En posiciones de liderazgo la responsabilidad es mayor pues involucra la habilidad para dirigir organizaciones y personas, esto es, mantener el foco, la motivación, la mente clara y además poder transmitirlo al equipo de trabajo haciéndolos modificar de manera voluntaria su comportamiento para alcanzar las metas .
Aquí es donde interviene la habilidad para motivar a los demás , el cómo hacer llegar un mensaje que mueva a la acción. Después de todo, los grandes líderes se conocen por haber planteado ideas poderosas, ideas que mueven masas y conciencias, que replantean escenarios, que generan los cambios. Mahatma Gandhi lo hizo involucrando a todo un país en su forma de lucha basada en la resistencia pacífica.
Cristóbal Colón lo demostró convenciendo a un grupo de aventureros para descubrir un nuevo mundo en el que nadie creía, y Francisco I. Madero, el Apóstol de la democracia en México lo hizo recorriendo nuestro país para hacer valer el voto. En esos y hasta en pequeños casos de la vida diaria, la forma de inspirar a otros, de generar confianza y conectar con las personas para darles razones y moverlos hacia la acción son características de todo líder.
Pero ¿cómo se hace un mensaje inspirador? ¿Cómo motivar a los demas?
¿Qué tomar en cuenta en esos momentos en que queremos compartir las visiones y fuerza que nos mueven? Los expertos de Harvard Bussiness Review nos indican métodos y técnicas que pueden ser útiles. En su artículo “How to tell a great history” (en www.hbr.org, Julio 30 de 2014) Carolyn O´Hara nos habla de la importancia de definir un mensaje claro para transmitir, el cual debe ser reforzado con ejemplos de nuestras propias experiencias. Que señalen los retos a vencer, manteniendo siempre un lenguaje simple y directo donde se conecten emisor y receptor en aquellos puntos e ideas comunes que le den sentido a ambos para lograr el propósito buscado.
Eso, además de otros aspectos, como evaluar el tipo de audiencia y resaltar de manera clara los valores morales que nos guían, logran que puedan transmitirse con empatía los elementos centrales que motivan la acción.
Siguiendo la temática, en otro artículo, O´Hara nos señala la importancia de convencer a través de una historia, lo cual es clave para transmitir un mensaje y motivar organizaciones, personas o equipos de trabajo que normalmente basan sus decisiones en estadísticas y datos duros. En “The right way to present your business case” (en www.hbr.org, 21 de Julio de 2014), la autora menciona la importancia de comunicarse a través de referencias sobre un hecho o un acontecimiento, que es contado apelando al lado emocional de la audiencia.
Esa historia debe prepararse para satisfacer las necesidades y preocupaciones de quien escucha y debe ser transmitida usando los medios adecuados, utilizando si es necesario material de apoyo pero sin perder de vista que lo más importante es lograr una conexión humana.
En el mismo sentido Stephen Denning en su texto “Telling tales” (en www.hbr.org, 1 de Mayo, 2004) nos revela la importancia de contar una buena historia para motivar el cambio en organizaciones enfocadas a negocios, incluso propone un esquema donde diferentes formas de contar una historia funcionan en ámbitos distintos. Estas aproximaciones nos llaman a reconocer como una habilidad esencial del liderazgo el saber exponer a través de una historia en la que se representen las ideas que muevan a la acción, ya sean como un ejemplo a seguir o un conocimiento que debe ser compartido.
Al igual que O´Hara, para Denning, esas historias que incluyen personajes en una trama con fortunas adversas o lecciones aprendidas y que mueven a la acción, son la mejor manera para hacer una conexión directa entre emisor y receptor.
Otro enfoque del tema nos lo da Peter Bregman en “A story about motivation” (en www.hbr.org, 3 de Febrero de 2010) donde nos invita reflexionar sobre lo que mueve a cada persona y lo que podemos hacer para incrementar o reducir esta motivación , y esto es básicamente asumiendo que cada persona piensa de sí misma y de su vida como en una historia, que cada vez que interactuamos con alguien, estamos jugando un rol en su libreto, y lo que sea que hagamos, lo que esa persona hace o lo que queremos que haga.
Necesita coincidir satisfactoriamente en su historia, así que cuando quieras algo de alguien, pregúntate que está tratando de decir acerca de ella misma y de qué manera tu papel y acciones refuerzan su historia y sus aspiraciones de manera correcta. Así, muchas veces más que el dinero o compensaciones materiales las manera de despertar la motivación interna es a través de entender y fortalecer la esencia de cada quien.
Regresando al fútbol para ejemplificar la manera de usar una historia como forma importante de motivación tenemos a Pep Guardiola, quien como entrenador del Barcelona llevó al equipo a grandes éxitos. Antes de un partido definitorio en que se jugaba una final con el Real Madrid los jugadores se quejaban del árbitro y rivales, Guardiola entonces les contó una historia sobre los verdaderos valores de la vida, pues ellos no sabían que en esa temporada uno de sus compañeros del primer equipo jugó 13 juegos de la temporada con cáncer diagnosticado hasta que no pudo más y entró a tratamiento.
En la historia que cuenta Guardiola ese compañero le tendió la mano al equipo mientras jugó enfermo arriesgando su vida, así que en lugar de excusarse en circunstancias externas les invitó a mirar dentro de ellos para encontrar la motivación para el juego. Dos horas después el equipo levantaba un trofeo más para sus vitrinas.
Parafraseando a Friedrich von Hardenberg, poeta alemán, “las palabras son la configuración acústica de las ideas”, así, la próxima vez al estar frente a nuevos retos, dirigiendo un equipo de trabajo, conviene tomar un momento para mirar a los ojos a los colaboradores y recordar la importancia y el poder que pueden tener las palabras dichas de la forma correcta, para motivar, para transmitir confianza y para explorar en el interior esa razón para ser mejores y poder motivar a los demás.
Minuto 120 del partido. Argentinos y holandeses se disponen al lanzamiento de tiros de penaltis por el pase a la final del Mundial de Fútbol, el logro más anhelado en este deporte. Después de un mes y 61 partidos los siguientes 10 minutos decidirán los sueños de los jugadores en el campo. Ante millones de espectadores en el mundo las cámaras enfocan a Mascherano, del prestigiado Club Barcelona hablándole de frente a su portero, Romero, que con un mensaje inspiracional le motiva para ser un protagonista de la historia; este es el día que en que se convertirá en héroe. Minutos más tarde el equipo argentino pasaba a la final, gracias en parte al entonces poco conocido Romero.