“En mujeres es más del doble de desempleo, que es la exclusión del derecho al trabajo. El 18 por ciento de los desempleados son mujeres y 8 por ciento son hombres y además hay 20 millones de mujeres que no buscan trabajo porque tienen obligaciones que cumplir en sus hogares”, dijo María Ayala, integrante de Acción Ciudadana. Foto: Acción Ciudadana Frente a la Pobreza.
De acuerdo con el Segundo Informe del Observatorio de Trabajo Digno, organizado por Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, las condiciones de trabajo en México son adversas y lo son más para las mujeres, peor si tienen menos de 30 años.
Ciudad de México.- La brecha salarial entre hombres y mujeres en Guatemala, Honduras y El Salvador no es la peor de la región, es la de México. Aquí, las mujeres tendrían que trabajar un mes extra al final del año para igualar el salario que recibe un hombre.
De acuerdo con el Segundo Informe del Observatorio de Trabajo Digno, organizado por Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, las condiciones de trabajo son adversas y lo son más para las mujeres y peor si tienen menos de 30 años. Para las mexicanas hay mayor desempleo, menos remuneración y mayor carga de trabajo en servicios de cuidado y labores domésticas.
“En mujeres es más del doble de desempleo, que es la exclusión del derecho al trabajo. El 18 por ciento de los desempleados son mujeres y 8 por ciento son hombres y además hay 20 millones de mujeres que no buscan trabajo porque tienen obligaciones que cumplir en sus hogares”, dijo María Ayala, integrante de Acción Ciudadana.
Los datos de Observatorio muestran que hay 20 millones 300 mil mujeres que no trabajan por realizar labores domésticas o de cuidado de niñas, niños, personas mayores o enfermas, pero no se les considera desempleadas, sino no disponibles para trabajar.
Sobre la brecha, Ayala explicó que la diferencia salarial entre hombres y mujeres equivale a cinco días más de trabajo y sólo con meses de 35 a 36 días podrían igualar el ingreso promedio que ellos reciben, lo que viola la norma de “a trabajo igual, salario igual” del Derecho al Trabajo Digno y es una de las formas de discriminación contra las mujeres.
“La diferencia salarial es de 16 por ciento, es decir, 797 pesos al mes. El ingreso de ellos es de 5 mil 800 pesos y una mujer recibe 800 pesos menos”, agregó Ayala.
Además, agregó, está la otra jornada laboral: la del hogar. Llegar a casa significa una doble jornada, ya que en promedio, una mujer que trabaja dedica 42 horas a tareas de cuidado y domésticas, mientras que un hombre dedica 16, lo que confirma la necesidad de tener servicios de cuidado para incluir a las mujeres en el campo laboral.
Para Rogelio Gómez Hermosillo, Coordinador de Acción Ciudadana, se necesita abrir la conversación porque “es escandaloso que México sea el peor país de la región en brecha salarial. El BID está preocupado de que la conversación no se dé”.
Ayala reiteró la necesidad de ofrecer a las mujeres más servicios de cuidado por el tiempo que se destina a las labores domésticas, ya que si se le suma un salario menor, el incentivo para no incorporarse al mercado laboral se intensifica.
AVANCE SALARIAL
Otro de los resultados que arrojó el Observatorio, es que en la recuperación gradual de los salarios, de un trimestre a otro, se observó un cambió en el salario insuficiente con 503 mil personas que superaron el ingreso para adquirir la canasta básica para su familia.
“Por primera vez el salario mínimo está por encima de la canasta básica. Con ese sólo efecto, 500 mil trabajadores lo tienen”, señala el reporte.
Es un dato muy relevante. El desempleo sigue en 12 por ciento, eso no ha variado, pero hay una propuesta que ya está en la Conasami y en Coparmex, para usar el monto de recuperación para que el salario mínimo sea suficiente para quien trabaja y su familia”, detalló Gómez Hermosillo.
Por Daniela Barragán, con información del portal SinEmbargo