PRESIDENTE ELECTO. Ante una percepción de que la carestía de precios continúa cediendo, el Banco de México (BdeM) dio señales mixtas de que podría acelerar el ritmo de reducción de la tasa de referencia; no obstante, sus miembros resaltan los riesgos que aún hay por delante, sobre todo los relacionados con la postura comercial, política y fiscal que tome el próximo gobierno de Estados Unidos encabezado por Donald Trump.
Según las minutas correspondientes a la última reunión de política monetaria del BdeM, en la que sus miembros decidieron bajar de 10.50 a 10.25 por ciento la tasa que determina el costo al que se financian empresas y familias en el país, tres de los cinco integrantes consideran que se puede aplicar un ciclo de disminuciones sin afectar la postura restrictiva, e incluso dos de ellos creen posible hacer recortes de mayor magnitud.
Es preciso señalar que la reunión se dio el pasado jueves 14 de noviembre, por lo que los miembros de la junta de gobierno del banco central no tenían en cuenta las recientes amenazas de Donald Trump de imponer a México aranceles de 25 por ciento.
No obstante, en sus intervenciones, la mayoría de los integrantes hicieron referencia a la incertidumbre que provoca el presidente electo de EU. Por ejemplo, uno de los miembros (la minuta no identifica a quien hace el comentario) hizo énfasis en que existe el riesgo de que las medidas que implemente el nuevo gobierno de ese país afecten la actividad económica, la inversión y la dinámica de precios.
Ante este panorama, indicó, existe la posibilidad de que hacia adelante el BdeM tenga que recalibrar constantemente su postura monetaria.
Sobre las minutas, analistas de Citibanamex, destacaron que el documento refleja que la junta de gobierno está dividida en cuanto a la magnitud del siguiente recorte, debatiendo entre un cuarto o medio punto porcentual. En contraste, Monex considera que la “visión de la junta de gobierno está en sintonía” a diferencia de meses previos, dado que todos reconocen que se debe seguir recortando la tasa.
Los inversionistas enfrían su apetito por el riesgo. Desde la tarde del lunes, cuando Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos adelantó que los primeros aranceles los aplicará contra China, México y Canadá, la divisa mexicana aceleró su caída frente al dólar, pues llegó a rondar los 20.70 pesos por dólar en el mercado al mayoreo. Y aunque moderó las pérdidas frente al dólar, al arranque de los mercados americanos, la moneda nacional se mantiene presionada.
La ofensiva comercial de Estados Unidos, de ser sólo declaraciones en una red social, a convertir en realidad una de sus mayores promesas durante la campaña electoral, una vez que tome posesión de su cargo, en enero de 2025, de comenzar a establecer aranceles, a China, México y Canadá, mantiene en alerta a los mercados financieros.
El tipo de cambio en México había recuperado niveles de 20.27 pesos por dólar spot al cierre de ayer en el mercado interbancario, pero borró sus ganancias y aceleró las pérdidas. La depreciación del peso mexicano se mantiene controlada, pues el diferencial de tasas que existe entre Estados Unidos y México, de más de 5 puntos porcentuales, sigue manteniendo el atractivo para la inversión en pesos, aunque algunos inversionistas optan por la cautela.
El alcance de los primeros aranceles anunciados por Donald Trump se extiende al mercado de divisas. De acuerdo con su índice DXY, que mide su comportamiento frente a una canasta de seis monedas internacionales, el dólar cortó su corrección, al avanzar y cotizar sobre los 106.80 puntos; el euro enfría su asalto al nivel de los 1.05 dólares. La cotización de la libra británica se atasca en el umbral de los 1.25 dólares.
El perfil más defensivo que adoptan los inversionistas ante la amenaza económica de los aranceles favorece las compras en la renta fija. El precio de los bonos sube y los intereses de la deuda bajan. La rentabilidad exigida al bono estadunidense a 10 años se enfría al filo del 4.283 por ciento.
Los futuros de los índices accionarios estadunidenses operan mixtos, el Dow Jones, tras marcar niveles récord, toma un respiro; mientras que el S&P 500 y el Nasdaq operan al alza, en una semana corta por los festivos en Estados Unidos.
Las promesas de Trump de aranceles y bajas en los impuestos ayudan a las empresas a mejorar su rentabilidad.
El impacto económico de los aranceles y las esperanzas de un alto el fuego entre Israel y Líbano han estado detrás del comportamiento del mercado del petróleo. En la jornada de hoy el barril de Brent intenta estabilizarse sobre los 73 dólares, con una ganancia de 0.98 por ciento esta mañana. En Estados Unidos, el barril tipo West Texas se mantiene por debajo de los 70 dólares, a 69.71 dólares, aunque avanza 1.06 por ciento.
La cotización del oro no logra sacar partido de momento al rebrote de las alertas por los aranceles. Los futuros del metal precioso operan en los 2 mil 653.59 dólares la onza. La corrección más acentuada se está dando en el bitcoin. Tras acercarse a la barrera de los 100 mil dólares, sufre su mayor caída desde el triunfo de Trump y se repliega hasta los 92 mil dólares.